Descripción: Mi mejor amiga me recomendó a esta masajista. Lo que yo no podía esperarme es que, en realidad, no me la recomendaba por sus manos, sino por su lengua. Y es que nunca me han comido tan bien el coño en mi vida.
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Descripción: Mi mejor amiga me recomendó a esta masajista. Lo que yo no podía esperarme es que, en realidad, no me la recomendaba por sus manos, sino por su lengua. Y es que nunca me han comido tan bien el coño en mi vida.