Descripción: Hay que comprender que cuando el masajista echa el aceite, sus manos acaban resbalando sin querer, tocando partes que una vez rozas ya no hay manera de parar. Así que la chica acaba calentándose y le pide al masajista que se la folle.
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Descripción: Hay que comprender que cuando el masajista echa el aceite, sus manos acaban resbalando sin querer, tocando partes que una vez rozas ya no hay manera de parar. Así que la chica acaba calentándose y le pide al masajista que se la folle.