Pamela Silva es el nombre de esta ardiente jovencita que cuenta con tan solo veintidós primaveras. Oriunda de Uruguay, sus credenciales son un culazo de infarto y dos melones que bien parecen zepelines. Pamela parece sentir cierta fascinación por los tatuajes, especialmente aquellos de temática floral. Tal vez sea una alegoría de su personalidad. Muchas flores son realmente hermosas, pero también poseen espinas que te pueden joder en cualquier momento. Y Pamela es dulce por fuera pero joder, jode que da miedo.