Kayla Green nació en Rusia pero lleva viviendo en Budapest desde hace mucho tiempo. Fue precisamente en la capital europea del porno donde descubrió que, gracias a su pasión por el sexo, podía convertirse en toda una pornostar. Kayla posee un cuerpo espectacular y con su edad ya casi se la puede considerar una MILF en toda regla dispuesta a devorar a todos los jovencitos que se le pongan por delante.